#Automovilismo Juan María Traverso repasó algunas de sus anécdotas en más de 35 años en el deporte motor.
(Por Campeones)
Desde su casa en Ramallo, en una extensa y enriquecedora charla con Carlos Alberto y Jorge Luis Legnani, en Campeones por Radio Continental, el Flaco repasó algunas de sus anécdotas en más de 35 años en el deporte motor.
Desde su aislamiento social y preventivo, en su casa de Villa Ramallo, Juan María Traverso se prestó a la charla con Carlos Alberto y Jorge Luis Legnani en Campeones, por Radio Continental.
La primera referencia del múltiple campeón del automovilismo argentino fue sobre la pandemia del coronavirus y cómo la afrontamos como sociedad: "Es algo que realmente me cuesta entenderlo. Estoy todo el día mirando lo que está pasando, y cuando veo a alguien que no cumple con la cuarentena, no lo entiendo; no me entra en la cabeza. No hay excusa, pero bueno. De todas formas, Argentina está dando el ejemplo a muchos países del primer mundo, y acá en Ramallo, hablo con el intendente y no anda nadie. Las dos entradas de la ciudad están clausuradas, y no puede entrar ni salir nadie, salvo que estés autorizado".
Y agregó: "Esto que está pasando, y cuando termine, va a arrancar un mundo un poquito diferente. Esta cuarentena provocó un montón de cosas en la gente, y creo que va a haber un mundo nuevo. Estamos todos hablando del desastre económico, pero va a quedar en un segundo lugar, porque antes va a estar la familia, los amigos, las reuniones".
Cuando lo consultaron sobre si aplaudía, todos los días a las 21.00, a los protagonistas del sistema de salud, el presidente de la Asociación Argentina de Volantes, aseguró: "Por supuesto. Hoy aplaudo a los médicos, a los enfermeros, y a todos los que están involucrados en la salud, porque se están jugando la vida. Hoy se les está dando valor, algo que siempre se tuvo que haber hecho. Por eso digo que van a cambiar muchas cosas a partir de esto".
Al introducirse en sus inicios dentro del automovilismo, Juan María contó: "En mi familia no había nadie relacionado a las carreras, y es como algo que nació conmigo. Por eso cuando pude, iba a las carreras, y cuando era más grande, me tomaba el tren y me iba a Buenos Aires. Yo era hincha de Eduardo Copello, y el día que debuté en TC, en la Vuelta de Pergamino, ganó el Maestro, y yo estaba más contento porque él había ganado más que por mi debut".
Y continuó: "Los jóvenes no saben lo que se perdieron. Cuando yo empecé, el automovilismo era muy importante y duplicaba al fútbol en repercusión. Hoy cuando se lo digo a algún pibe, me dice ‘este viejo...'. Fue una hermosa época. Yo soy fanático de la buena tecnología, como esta que usamos para comunicarnos, pero no me gusta la mala tecnología, como la que usa mi nieta, que pasó de la mamadera al iPad. No me gusta comparar épocas; no me gusta comparar a Fangio con Schumacher o Senna. Pero en esa época, vos podía arriesgarte a quemar o romper el auto, pero hoy, si el piloto se equivoca y hace volar el auto, lo sacan del equipo. No corre más".
Al recordarle que, hace unos días, se cumplieron 32 años del recordado triunfo en General Roca con la cupé Fuego en llamas, el Flaco relató: "En esa época ya estaba la televisión, pero estas cosas, antes, los autos también se prendían fuego y lo veían solo algunos, los que estaban en ese lugar. Por eso digo que el automovilismo tiene una base, que hoy, con la tecnología actual, se perdió. Por eso quiero que se recupere un poco esa esencia. Aquello fue una locura de alguna manera, pero soy adepto a hacer lo que te apasiona y lo disfruté, y lo sigo disfrutando. Pero cuando alguien hace algo que no lo apasiona, no lo disfruta".
Y agregó: "Hoy, cuando entro a mi museo, y veo al Torino con el que debuté, digo ‘cómo pude haberme subido a esto', porque al lado tengo con el que me retiré, que es algo totalmente distinto".
Al respecto de su retiro, en 2005, antes de correr una serie en Olavarría, Traverso recordó: "Corrí un par de años de más, para asegurarme no volver, pero el motivo principal es que me estaba metiendo en una generación que no me correspondía. Una cosa era hacer las maniobras con Maldonado, el Viejo Di Palma, Bessone, no las podía hacer con los chicos. Y ese día dije ‘basta'".
Cuando se le pregunto sobre las modificaciones que se ensayan en los reglamentos deportivos y técnicos para balancear la performance entre las máquinas, el ramallense expresó: "Para mí tiene que largar primero el que anduvo más rápido el sábado y gana el que llega primero; todo lo demás no es lógico. Mi equipo y yo trabajamos para hacer un auto rápido, para sacarle la mayor ventaja a mi rival, y me ponen 30 kilos. No me gusta todo eso".
Por último, Juan se refirió a la relación que había entre los pilotos en su época. "No se mezclaba la pista con la amistad. Yo iba a Luis a pedirle disculpas y me decía: ‘Olvidate, en 15 días, nos vemos de nuevo', y nos poníamos a tomar mate", manifestó.
