#Futsal El emblema de Comercio, Nacho Roldan charlo en exclusiva con MZL Deportes.
(Por Lien Tapia)
El emblema de la institución verdinegra, en pleno receso, dejó sus conclusiones y proyecciones en materia de Futsal, siendo crítico del 2023, pero redoblando la apuesta para la nueva competencia.
“Si bien las expectativas eran altas por lo que significa Comercio, no hicimos buenos torneos en líneas generales, estuvimos un poco débiles en cuanto la mentalidad. Hicimos muy buenos partidos a lo largo del año pero de alguna u otra forma siempre los terminábamos perdiendo, ya sean partidos de fases regulares y sobretodo los claves como en Copa Argentina o Liga Nacional. Así como las cosas buenas se contagian, las negativas también y quizás nos metimos en un lugar en el que veíamos que se repetían las situaciones y nos costó muchísimo poder salir de ahí. Al no conseguir resultados la cabeza te juega en contra y lo anímico no levanta”, profundizó de entrada en el balance de la última temporada.
Y fue claro en lo que viene: “Yo creo que podemos seguir compitiendo de igual a igual, con nuestras limitaciones, obvio. Es difícil porque hay muy buenos equipos con mucha jerarquía. Si ves como terminaron los torneos la lógica indica que estamos claramente un escalón por debajo de varios conjuntos, pero siempre intentando prepararnos y tratando de mejorar para acercarnos a los puestos de arriba, la idea es esa, apuntar alto”-
Sin dudas que Comercio es un club que se caracteriza por el caudal de sus categorías juveniles e inferiores, mucho hay en el ADN del club de ese trabajo de fondo y muchos de esos jóvenes ya son parte fundamental del equipo de Primera.
Con relación a este modelo de club, Roldán, acaso uno de los hijos pródigos de Comercio, manifestó: “Si hay algo que nos caracteriza son nuestras divisiones inferiores. El año pasado los chicos tuvieron bastante protagonismo en muchas categorías y lo hicieron muy bien, además son un pulmón importantísimo para la Primera. Yo creo que lo mejor es siempre lograr un equilibrio entre la experiencia y la juventud. Necesitamos de ellos, porque nos dan esa rebeldía que siempre es importante tener en un equipo, aunque siento que nos falta jerarquía también, jugadores puntuales para momentos claves, cómo la definición por ejemplo, quizás un goleador nos solucionaría muchas cosas”.
Uno de los momentos más altos de la institución fue en el Ecuador de la temporada cuando Comercio llegó a la final de la Copa Ushuaia que finalmente no pudo conseguir. El capitán verdinegro da su apreciación de lo ocurrido y su postura a futuro sobre si aquella derrota es algo netamente negativo o si por lo contrario se tiene que tomar como un faro a futuro: “Trato siempre de ver el lado positivo a las cosas, y muchas veces intento hacerle entender, sobre todo a los más chicos, que la posibilidad de pelear o no un campeonato pasa por nosotros mismos. Y la situación más clara fue esa final que nos tocó perder. Cuando estamos convencidos y mentalmente fuertes, podemos llegar a competir en los últimos partidos. Entonces espero que podamos tomarlo como algo a favor y que los chicos se den cuenta que podemos competir de igual a igual con cualquiera. Entender que nadie nos regaló nada en esa Copa y que estuvimos realmente muy cerca. Nos puede servir para lo que viene, para la confianza, pero depende de cómo cada uno lo canalice”.
De cara al 2024, un año que obliga a barajar y dar de nuevo, comentó: “Cada año que empieza el objetivo es el mismo, prepararse, entrenar y laburar fuerte para poder competir. El objetivo siempre es ser protagonista. Siempre hay que poner la vara bien alta, así lo vemos y nos exigimos para poder lograr ese objetivo, lo demás viene en tanto y en cuanto todos estemos en la misma sintonía”.
Para cerrar, el pivot hizo un pequeño balance de su año individual y habló de su amor incondicional por sus colores y su club: “En lo personal, me sentí bien durante gran parte del año, siento que pude aportar unos cuantos goles al equipo en momentos importantes. Se me dio la citación a la Selección que es algo que siempre me quedó pendiente en mi vida deportiva. Lamentablemente no tuvimos la posibilidad de viajar por la suspensión del torneo. Y con respecto a este año sin dudas el objetivo a corto plazo es prepararme de la mejor manera y poder lograr un poco más de continuidad y cambiar la mala racha que tuve con las lesiones que me tuvieron a maltraer en la última parte del año. Eso es la base de todo lo que pueda venir después”.
“Comercio significa algo muy importante en mi vida. Si hay algo que es difícil de explicar es la pasión, y yo tengo pasión por este club y estos colores. Una de las cosas que más me enorgullece es ver los partidos de los más chicos y ver cómo gritan cada gol y se besan el escudo, de la forma que aman el club. No hace falta decirles nada, esos pibes ya entendieron todo. No se si me veo jugando muchos años más, pero mientras siga sintiendo que estoy a la altura le vamos a seguir metiendo para adelante, eso sí, siempre con la verde y negro”, finalizó con contundencia.
El club de sus amores. El club de su infancia. Su club.
