#Atletismo Con la suspensión de la Maratón de Malvinas, Pablo Ernaga no baja los brazos y se sigue preparando para el 2021.
El atleta riograndense Pablo Ernaga tenía planeado correr en la Maratón de Malvinas el pasado 29 de marzo, pero la pandemia le cortó el sueño. Había realizado una fuerte pretemporada en Chile y actualmente está en Rio Grande tras cumplir con el aislamiento.
Por tierras inhóspitas y con un clima traicionero, la Maratón Internacional de 42 kilómetros que se desarrolla en Stanley (Islas Malvinas) es uno de los desafíos más grandes para los atletas de todo el mundo, pero particularmente para los argentinos, por todo lo que ello significa. Y luego de hacer podio en su primera presentación, Pablo Ernaga tenía ganas de revancha este año.
Ernaga, que en julio cumplirá 35 años, es uno de los mejores atletas fueguinos -el mejor de su disciplina- y se estaba preparando en Chile desde hacía varios meses para llegar en óptimas condiciones a la carrera que debía correrse el 29 de marzo. Sin embargo, la pandemia del COVID-19 le “cortó las piernas” y deberá retrasar su sueño de consagrarse en las Malvinas.
Fue un golpe duro para él, que se encontraba en plena pretemporada en Chile cuando se enteró de la noticia. Fueron “dos meses en Concepción y de ahí me fui para Calama, a entrenar en los 2400 metros de altura para generar glóbulos rojos, para tener mejor rendimiento al bajar a nivel del mar. Es algo que hacemos para bajar registros personales. En la altura es muy pesado entrenar y se sufre, pero después cuando ves los resultados, lo vale”.
“Mis objetivos para el primer semestre del año eran la Maratón de las Islas Malvinas, el Nacional de Cross Country en Buenos Aires y, en junio, el Mundial de 10000 metros en Toronto, Canadá”, agrega en función de la planificación que tenía.
Sin embargo, el 13 de marzo cayó el baldazo de agua fría: “Viajando a San Fernando, para participar del Campeonato Nacional de Chile, nos confirman a todos los atletas que se suspendió la Maratón Internacional de las Islas Malvinas 2020”, contó en sus redes sociales entre lágrimas.
Tanto sacrificio se esfumó entre las manos de un momento a otro: “A mis hijos les pido perdón, luego de dos meses sin verlos. Llegaba muy bien físicamente para dar lo mejor por mi provincia y mi hermosa ciudad, donde nací. Me siento muy triste”, continuó.
Ya en diálogo exclusivo, en medio del aislamiento, Pablo nos contaba: “Mis sentimientos por Malvinas son únicos y haber peleado el maratón 2018 fue increíble. Este año llegaba mejor que nunca. Mi sueño es ganar en nuestras islas, vencer a los ingleses y dejar el corazón por nuestros caídos en Malvinas”.
Masticando bronca, pero con sed de revancha, Ernaga no piensa bajar los brazos y, entre la incertidumbre de saber cuándo podrá volver a competir, ya se prepara con la cabeza puesta en el desafio de 2021.
Mientras tanto, agradece a aquellos que lo vienen apoyando en todo éste tiempo: “al Municipio de Río Grande, al intendente Martín Pérez, al Gerente Ejecutivo de la Agencia Municipal de Deportes, Cultura y Juventud Sebastián Bendaña, que facilitaron los pasajes, al Gobierno de la Provincia, al Gobernador Gustavo Melella y al Secretario de Deportes Carlos Turdó, quienes me ayudaron en la estadía en Malvinas y como siempre al Sindicato de Camioneros, de la mano de Pedro Abel Velázquez, que me ayudó en toda la pretemporada y me viene apoyando desde hace 8 años. También estoy muy agradecido con Herbalife Nutrición Argentina, mi main sponsor que por segundo año consecutivo me ha elegido cómo uno de sus atletas representantes. Es un gran orgullo”.
